Será el primer ex dictador centroamericano en ser enjuiciado por crímenes
de lesa humanidad cometidos durante su mandato
Carlos Arrazola (EFE) Guatemala 29/01/2013
Fotos das vítimas de Montt |
Durante más
de catorce años José Efraín Ríos Montt se hizo elegir de forma consecutiva
diputado al Congreso para evadir a la Justicia de Guatemala, que le merodeaba
para que respondiera por la sangrienta represión militar que desató durante los
quince meses que gobernó de facto el país en los años ochenta.
Este lunes,
la historia que quiso olvidar alcanzó al anciano general cuando el juez
Miguel Ángel Gálvez, titular del juzgado Primero B de Mayor Riesgo, ordenó
sentarlo en el banquillo de los acusados y someterlo a un juicio penal acusado
de genocidio y delitos contra la humanidad.
Será el
primer proceso por genocidio al que sea sometido en Guatemala un ex alto
cargo castrense como Ríos Montt, junto a uno de sus colaboradores, el
exgeneral José Mauricio Rodríguez. También será el primer ex dictador
centroamericano en ser enjuiciado por crímenes de lesa humanidad cometidos
durante su mandato.
La Fiscalía
guatemalteca acusa a Ríos Montt de haber ordenado la matanza de al menos 1.771
indígenas ixiles entre marzo de 1982 y agosto de 1983, como parte de la
estrategia de "tierra arrasada" impulsada por el Ejército, del que
entonces era Comandante General, para combatir a las fuerzas insurgentes.
Desde 1974,
cuando se presentó como candidato presidencial del desaparecido partido
Democracia Cristiana, hasta la fecha, este militar retirado de 86 años ha sido
uno de los más destacados protagonistas de la vida política de Guatemala.
Resaltó como militar de línea dura, pastor de una congregación evangélica
fundamentalista, mesiánico líder político de derechas, eterno aspirante a la
Presidencia e icono de la brutal represión desata por las Fuerzas Armadas
durante los años más cruentos de la guerra interna que vivió Guatemala entre
1960 y 1996.
El 23 de
marzo de 1982 integró la Junta Militar designada por los oficiales jóvenes del
Ejército que por medio de un golpe de Estado derrocaron al entonces
presidente, el general Fernando Romeo Lucas García. Tres meses después
disolvió la Junta Militar y se autoproclamó Jefe de Estado, presidente de la
República y Comandante General del Ejército.
Una de sus
primeras medidas fue poner en marcha los Tribunales de Fuero Especial, en los
que jueces con el rostro cubierto condenaron a muerte a 16 personas, y
obligar a los indígenas a integrarse a las denominadas Patrullas de Autodefensa
Civil, grupos paramilitares de control y represión.
Según
diversas fuentes académicas y defensores de los derechos humanos, durante los
17 meses que Ríos Montt gobernó de facto el Ejército perpetró más de 250
matanzas colectivas de indígenas, sobre todo en las zonas del oeste y
noroeste del país, en las que murieron más de 25.000 personas.
El 8 de
agosto de 1983 Ríos Montt fue derrocado por un golpe de Estado encabezado
por su entonces ministro de la Defensa, general Óscar Humberto Mejía Víctores,
quien gobernó el país hasta enero de 1986, cuando se instauró la democracia.
A finales de
1989, junto a un grupo de antiguos militares y políticos de extrema derecha,
fundó el Frente Republicano Guatemalteco (FRG), el partido que le permitió ser
reelegido como diputado del Congreso desde 1994 hasta 2012, cuando concluyó su
último período legislativo. A pesar de que la Constitución guatemalteca prohíbe
a caudillos y golpistas presentarse como candidatos a la Presidencia, logró el
apoyo de la Corte de Constitucionalidad para inscribirse como aspirante al
cargo en las elecciones de 2003, que perdió de forma aplastante.
La Justicia
empezó a acercarse al general para que respondiera por los crímenes cuando en
diciembre de 1999 la premio Nobel de la Paz 1992, la líder indígena
guatemalteca Rigoberta Menchú, presentó una querella contra ocho ex altos
cargos militares, Ríos Montt entre ellos, ante la Audiencia Nacional de
España.
La denuncia
de Menchú por cargos de genocidio, torturas y terrorismo de Estado, fue
admitida a trámite por el juez español Guillermo Ruiz Polanco el 27 de marzo de
2000, que meses después emitió una orden internacional de captura con fines de
extradición a España, la cual nunca se concretó.
Aunque el
proceso penal ante la Justicia española continúa abierto, en diciembre de 2007
la Corte de Constitucionalidad, el máximo tribunal guatemalteco, dejó sin
efecto lo actuado por la Audiencia Nacional al considerar que el alto tribunal
español no tenía competencia para juzgar a guatemaltecos. Meses antes, la
Asociación por la Justicia y la Reconciliación, integrada por familiares de las
víctimas de la represión, presentó una denuncia penal ante los tribunales
guatemaltecos por genocidio contra él y otros militares retirados por las
matanzas de indígenas perpetradas por el Ejército.
En enero
de 2012, tras cumplir su último período como diputado y perder la inmunidad, Ríos
Montt se presentó ante la Justicia para afrontar las acusaciones contra él
presentadas en 2007, y una jueza lo incluyó en el proceso y ordenó su prisión
preventiva domiciliaria.
Este
lunes, un año después, el juez Gálvez le concertó una cita con la historia, al
ordenar que sea enjuiciado por genocidio y crímenes de guerra, el primer
proceso de ese tipo contra un ex alto cargo castrense en Guatemala.
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