La trayectoria del pintor se repasa en las 40 obras expuestas en Pontevedra
JOSÉ LUIS ESTÉVEZ - Santiago - 15/09/2011
Las salas del Centro Social de Novacaixagalicia en Pontevedra acogen desde ayer una muestra antológica dedicada al pintor Manuel Pesqueira (Lantaño 1911-1987), quien tuvo como profesor de dibujo a Castelao y reflejó a lo largo de toda su carrera artística el mundo rural en el que vivió. Pesqueira fue uno de los últimos representantes de la Escola Galega, un grupo de artistas que surgieron en los años previos a la Guerra Civil y que compartían el interés por intepretar las características estéticas de la Galicia de la época. El centenario de su nacimiento ha sido la excusa para reunir su obra más representativa en una exposición que en diciembre se trasladará a Santiago.
La biografía de Pesqueira quedó marcada por la mutilación de la mano derecha que sufrió durante su participación en la Guerra Civil. Esto le obligó a aprender a pintar con la izquierda, con la que ejecutó toda su producción artística posterior, y le limitó para la práctica de otras técnicas más allá de la pintura. El comisario de la muestra, Fernando Vilanova, señala que la obra de Pesqueira se caracteriza por la temática agraria y por una caligrafía "caricaturista", siempre con la figura humana como referente.
En el recorrido por la exposición pueden verse cuadros pintados desde 1945 hasta los años ochenta. Escenas de trabajos en el campo y de la vida en los pueblos de la Galicia rural constituyen el grueso de la producción de Pesqueira. Ya en su primera exposición, celebrada en 1933 en Pontevedra, presentó óleos y dibujos de tema agrarista, inspirados en parte en la visión que Castelao había transmitido a través del álbum Nós.
"La obra de Pesqueira aporta la continuidad de una visión del mundo rural marcado por los movimientos agrarios registrados antes de la Guerra Civil. Hay un cierto rechazo hacia la Galicia urbana. El interés por reflejar esta realidad es una constante en su obra. Es un mundo rural en un estadio precapitalista que también fue reflejado en el documental Galicia, de Carlos Velo, o en Nós de Castelao", explica el comisario de la muestra, quien destaca que hubo pocos artistas que reflejasen la sociedad rural gallega de una forma tan enxebre. "Fue un epígono de los renovadores", concluye Vilanova.
La obra que desarrolla desde su retiro en Lantaño, en el municipio de Portas, a partir de los últimos años de la década de los sesenta será extraordinariamente descriptiva y de temática reiterada, producto de la observación cotidiana de las cosas que sucedían en la sociedad rural en la que desarrollaba su vida. Las personas son las grandes protagonistas, tanto en el trabajo como en el ocio o en las relaciones personales. Escenas de labores en el campo, en las tabernas o en los acontecimientos sociales del pueblo son los temas habituales de sus cuadros. A partir de los años ochenta se registra una evolución en su obra ya que dulcifica los trazos del dibujo y hay una cierta "deconstrucción" de su estilo, según indica el comisario. En la exposición pueden verse algunos cuadros de esta época tardía de Pesqueira en la que se aprecia una estructura cubista en sus cuadros. El pintor incorpora el movimiento a sus personajes y la línea negra que encorsetaba al dibujo se fragmenta y decolora en tonos grises.
Vilanova señala que Pesqueira llegó a presentar sus obras en exposiciones celebradas en Madrid y en Argentina, aunque nunca alcanzó la proyección fuera de Galicia que sí tuvieron otros artistas de la época como Manuel Colmeiro o Luís Seoane. Sus cuadros están muy dispersos ya que vendió muchos a lo largo de su vida. El centenario de su nacimiento es una buena ocasión para volver a un pintor con una obra de indudable interés.
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