El Tribunal Internacional de Justicia falla en contra de
una demanda de Italia
Los jueces defienden la inmunidad del Estado alemán
frente a las reclamaciones de víctimas cursadas en tribunales de otros países
Las indemnizaciones pagadas por Alemania desde 1950 suman
millones de dólares
ISABEL FERRER
La Haya 3 FEB 2012 - 16:22 CET
El Tribunal Internacional de Justicia de Naciones Unidas (TIJ) ha fallado
contra Italia en un caso complejo que mezcla la inmunidad estatal con las
reparaciones exigidas por las víctimas causadas por los nazis durante la II
Guerra Mundial. En una demanda presentada por Alemania contra Italia en 2008,
el TIJ ha decidido que los jueces italianos violaron la soberanía germana al
permitir que uno de sus ciudadanos, Luigi Ferrini, pidiera una indemnización
por los trabajos forzados a los que fue sometido por los nazis. La decisión
dejará sin efecto otras demandas similares ya cursadas en Italia en Tribunales
nacionales y sienta un precedente en cuanto a las causas de reparación por
crímenes de guerra abiertas a escala nacional contra Alemania.
Según los jueces de la ONU, “la inmunidad de los Estados frente a cortes
extranjeras viene refrendada por el derecho internacional. Italia quebrantó su
obligación de respetarlo al dejar que se tratara un asunto de derecho
humanitario referido a los crímenes cometidos por Alemania entre 1943 y 1945”.
El TIJ ordena asimismo a Roma que se asegure de que no vuelva a ocurrir.
A pesar de que Italia y Alemania fueron aliadas durante la guerra, muchos
italianos acabaron siendo prisioneros de las tropas nazis. La mayoría hicieron
trabajos forzados lejos de su casa. Luigi Ferrini fue uno de ellos. Deportado
hacia el final de la contienda, tuvo que trabajar en la industria armamentista
germana. Nunca recibió una compensación por lo ocurrido. En 2004, el Supremo
italiano falló en su favor y abrió la puerta a otras peticiones de reparación
de guerra similares. En estos momentos, hay por lo menos 500 compatriotas suyos
que han presentado en su tierra casi un centenar de quejas.
Un grupo de familiares de víctimas griegas de una masacre nazi, perpetrada
en 1944 en la ciudad de Distomo, acudieron asimismo a los tribunales italianos
pidiendo una reparación. En dicho enclave griego perecieron 214 civiles en el
peor crimen de la ocupación nazi. El fallo del Tribunal de la ONU ha negado
también a Italia la facultad de tramitar demandas de este tipo cursadas por
otros países. Para indemnizar a las víctimas propias y también a las griegas,
los jueces italianos habían confiscado la Villa Vigoni, un centro cultural
germano-italiano abierto en el lago de Como. El fallo del TIJ deja sin efecto
esta medida.
En su defensa del caso, Italia argumentó que los abusos cometidos por las
tropas alemanas equivalían a un crimen internacional. Estarían, por tanto, por
encima de la soberanía estatal. Alemania, que recurrió al Tribunal de la ONU
para evitar un aluvión de querellas similares, alegó que ello pondría en
peligro los acuerdos con Israel y otros países que derivaron en compensaciones
de guerra millonarias efectuados desde 1950. “El fallo muestra las tensiones existentes
entre el derecho internacional y las cuestiones humanitarias, cuando la
inmunidad de un Estado se pone en entredicho. En otras palabras, un Estado, en
este caso Italia, no puede decir desde sus tribunales nacionales que es más
soberano que Alemania, o cualquier otro”, señala Jan-Anne Vos, experto en
derecho internacional del Instituto Asser, en La Haya.
Si bien la parte jurídica de la decisión es inamovible,
el TIJ ha hecho una consideración significativa. Durante la lectura, el
presidente, Hisashi Owada, ha subrayado la sorpresa de que Alemania excluyera
de sus compensaciones de guerra a las víctimas de trabajos forzados. “En
Italia, la mayoría de los detenidos fueron llevados a trabajos forzados, pero
no se les ha reconocido el estatuto de prisionero de guerra. Aunque ello no
cambia el principio de inmunidad estatal, que no admite excepciones, las
demandas de pagos que no se hayan satisfecho pueden ser negociadas en el futuro
entre ambas partes”, ha dicho.
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